Sinopsis
El ruido de la vida nos aturde. El silencio nos regenera. Para escuchar
el silencio no hace falta internarse en un bosque frondoso o hacer
espeleología para sumergirse en el silencio mineral de una montaña. Escuchar
el silencio es aceptar la invitación a descender para dejar la
superficie, el ruido, la agitación, las preocupaciones, las preguntas,
lo urgente. Como un submarino que se encuentra en aguas profundas,
tienes que descender dentro ti y encontrar la calma abismal que vive en
tu interior. Es una aventura espiritual para los que no se sienten
demasiado espirituales, para los no creyentes, para los laicos, también
para los que no se creen capaces. Es la aventura del posible encuentro con el Amigo interior que los creyentes llamamos Dios. Rémi Chéno nos ofrece una iniciación a la vida espiritual en una sola etapa, hacer silencio.