Manifestaciones cardiovasculares en las enfermedades reumáticas

Manifestaciones cardiovasculares en las enfermedades reumáticas

Por Gerardo Bori Segura, S. A. de C. V. Editorial Alfil (Editor), Manuel Robles San Román

Formato: PDF  
Disponibilidad: Descarga inmediata

Sinopsis

Las enfermedades reumáticas son una serie de alteraciones mórbidas en las cuales se involucra el aparato locomotor, muchas veces sin relación con causas traumáticas o de violencia, lo que hace presuponer factores de relación genética, metabólica, inflamatoria o degenerativa, entre muchos otras; sin embargo, como se analizará a lo largo de esta revisión, estos conceptos no son definitorios y probablemente servirán sólo al inicio para marcar la diferencia entre especialidades médicas interrelacionadas, como traumatología y ortopedia, y rehabilitación y medicina física. Con muchas de las entidades clínicas tiene una estrecha relación la participación del aparato cardiovascular, ya sea por la interrupción de nutrientes en la isquemia crónica por afección de los tejidos arteriales en las capas de la íntima y la adventicia de los vasos (como sucede en las vasculitis) como por la formación de anticuerpos específicos hacia un antígeno o tejido propio, con la baja de la tolerancia a las células propias que desencadene una enfermedad de complejos inmunitarios. En este gran capitulado de vasculitis o vasculopatías hay que destacar las que involucran a los grandes vasos (como la de células gigantes o polimialgia reumática y la arteritis de Takayasu), las que afectan a los medianos vasos (como la poliarteritis nodosa o la angeítis de hipersensibilidad) y las que afectan a los pequeños vasos (como la crioglobulinemia, entre muchas otras). Con base en la participación del tipo de vasos que se afectan se determinan los cuadros clínicos, su grado de severidad y su grado de extensión, entre otros; así, se contemplará la necesidad de usar esteroides, medicamentos inmunorreguladores, inmunosupresores o en su caso los FARMES o modificadores del proceso natural de salud– enfermedad. El sistema cardiovascular es y será el eterno presente en la relación de los tejidos y su nutrición, parte de los territorios de reconocimiento inmunitario, la conjugación de la homeostasis de los líquidos en las fuerzas hidrostática y oncótica en relación con la osmolaridad sérica, que se pierde en los pacientes portadores de albuminuria en algunos tipos histológicos de lesión renal del lupus eritematoso sistémico; además, se pueden observar ciertas excrecencias en el tejido valvular endocárdico que son las vegetaciones de Liebman–Sacks, similares a las observadas en los niños portadores de fiebre reumática en sus cuadros de endocarditis. Decir "cardiovascular y reumatismo" implica identificar una relación fisiológica armónica en un todo. Lo que suceda en los órganos impactará en la irrigación, en el tono de las metaarteriolas, con el aumento en su caso de las dinas de la resistencia periférica y la consecuente aparición de la hipertensión arterial. También está relacionada en la aterogénesis acelerada con el sedentarismo de los pacientes, favorecida por el uso de medicamentos necesarios (como los esteroides) o el uso indiscriminado y los tiempos alargados de los antiinflamatorios no esteroideos y su relación con la nefritis intersticial y la afección de la microcirculatura renal.

Manuel Robles San Román